viernes, septiembre 22, 2006

"Para no olvidarte jamás, mi negro"

De pronto pasas de ser un Don Nadie a Superstar. Así como jugando, la vida te sonríe y en un abrir y cerrar los ojos ves tu nombre en las marquesinas de los teatros.

Poleras con tu marca se venden como pan caliente. Llaveros, encendedores y ropa interior también forman parte del merchandising.

Ahora lo único que falta es que alguien se haga un tatto con ese sello que te caracteriza. Lo siento: es el precio de la fama.


¿Quieres pasarte el rollo? Aquí está el link.

jueves, septiembre 21, 2006

¡¡EXCLUSIVA!! Cavada en New York: "Na' que ver que en los McDonalds gringos no vendan completos" (Reportaje gráfico de la visita del Mister)








Tan sorpresiva como esa llamada a las 3 de la mañana que suele hacer a algún incauto en día martes, fue la llegada de Pablo Cavada a la ciudad de Nueva York. El ilustre reportero de Publimetro, valiéndose de esas típicas -pero escasas- invitaciones de empresas que buscan ganarse un espacio en los diarios, permaneció durante 4 días en la Gran Manzana con sólo 100 dólares en la bolsa.

"Es que me avisaron con pocos días de anticipación y además recién me cambié de casa. Si ni viático me dieron", se justificó el autor de la famosa "Cavadiana" por si alguien le reclamaba su respectivo souvenir neoyorkino.

En su paso por la capital del Imperio, el "Mister" se dio maña para juntarse con su ex compañero de labores, Gato Félix, y entonar ese lacrimógeno himno que marcó a toda una generación. "No hay otro don mejor, que el de dar... según lo que creas, así seraaaaaá", fue cantado a todo pulmón en la esquina de Times Square ante la atónita mirada de los cientos de turistas chinos que a esa hora (21.30) se agolpaban en el lugar.

Fueron cerca de 4 horas en las que la dupla de oro conversó, lloró y bebió la alegría del reencuentro tras un año y algo de separación.

Durante la jornada Pablo también aprovechó de visitar los lugares más típicos de la ciudad como un local de McDonalds, el hotel Marriott (el más ordinario de toda la compañía) o una tiendita de regalos donde los productos son fabricados en Taiwan.

En síntesis, una visita que quedará en el inconciente colectivo de todos quienes presenciaron como el chileno se manejó con soltura frente al encuentro casual con Bob Esponja o la efectividad de su célebre mirada "Ferrari" a lo Zoolander (ver foto).

Es cierto, es un loco, pero un loco más lindo que la cresta. Vale papaaaaá. Vuelva cuando quiera.

lunes, septiembre 18, 2006

Un chileno sin su Chile, pero más picante que nunca (el eterno proyecto).


Me siento en deuda. Estoy en deuda conmigo. Cuando empecé este blog lo hice con la firme convicción de desafiar algo que siempre me ha costado: Escribir. Cada post se transforma en toda una proeza y por lo mismo tengo varios textos a medio terminar, como gran parte de las tareas que me impongo y que se estancan entre el letargo y la flojera. Acostumbrado a buscar la inexistente perfección, suelo caer en el vicio de fijarme más en la forma que en el fondo y por lo tanto no me permito errores; no me permito ser yo.

Hace mucho tiempo que no escribo en este espacio: mi espacio. Los factores son varios, pero uno de ellos es el querer encontrar la mejor historia para contar. Durante todo este año -indudablemente- se han acumulado unas muy buenas, sin embargo suelen sumarse demasiadas como para dejarlas fluir.

De todas formas pretendo seguir por el camino amarillo. Mi idea es completar. No importa que se acumulen los proyectos, las historias, las fotos. Por lo menos intentaré llevar a cabo cada uno de esos cometidos. "No hay peor trámite que el que no se hace", dicen.

Y como estamos en época dieciochera, y aunque para mí no sea feriado ni nada, les dejo esta cueca inspirada en una chilena de acá y que forma parte de la faceta compositora que se ventila de vez en cuando (tengo 12 canciones a medio terminar, pero esta es la primera en saberse "entera").

Esta cueca, tiene el típico inicio con rasgueo en La y que se supone será musicalizada por Adán Nayit en el futuro próximo (éste es un recordatorio).

Como esta pelota es mía, aprovecho de saludar a todos los amigazos y amigazas, hermano y papás (desde Mendoza) que se acordaron de su servidor en el fatídico día de su cumple. Yo sé que hay varios que también envejecen en estas fechas, y aun cuando se me confunden los días, lo cierto es que no me olvido (Oso, Claudio, Xime, Andrea... y una chorrera más).

Aquí va la cueca pop, que vendría siendo una versión urbana y, por qué no decirlo, de corte indie. Si alguien la saca primero en guitarra, puede amenizar la fonda familiar.

La Cueca de Tania.

Qué se pierde
Qué se pierde cuando ganas
Si mi orgullo
Si tu orgullo puede más.

Cuando viene
Cuando viene la tormenta

Yo me cubro
Yo me cubro de tí más

Sueles ser
Sueles ser como el reflejo
De todo eso
De todo eso que dejé allá atrás

Así y todo
Así y todo no me arrepiento
De quererte
Y quererte cobijar

Bueno, ya me voy
Ya me voy de la manzana
Ya te pierdo
Ya te pierdo en la ciudad

Hoy Manhattan
Hoy Manhattan abre ojos
Y esta noche
Te los vuelve a cerrar

Si despierto
Si finalmente despierto
Ya sabré

Ya sabré quien ha de ganar

PLR Records 2006. Todos los derechos están reservados bajo siete llaves.