jueves, junio 29, 2006

Adios en la frontera. Adios al sueño americano

Heriberto venía a New Jersey desde hace 7 años. Con su papá y unos primos se dedicaba a la instalación de mármol y cerámicas. El negocio era próspero para él, ganaba suficiente dinero como para construirse una casa en su rancho de Michoacán, México. Estaba pronto a cumplir los 23 y este año sería clave para adquirir una camioneta, una "troca", como le llaman sus coterráneos.

La experiencia le dijo que en esta oportunidad todo sería igual. Cada 8 meses el trámite siempre fue el mismo: contactar al "coyote", cancelar la mitad del dinero acordado por cruzar la frontera, esperar el llamado y embarcarse para llegar a la tierra prometida. Si todo salía bien, Heriberto daría la segunda parte del monto, lo que en total sumaba 2 mil dólares.

Cifras extraoficiales señalan que cada día más de mil personas intentan cruzar ilegalmente la frontera entre Tijuana y San Diego (EEUU). Muchos lo logran, pero algunos nunca llegan a puerto. Varios se pierden; no son pocos los que son secuestrados por los "cholos", quienes luego cobran rescate a sus familias. Otro número es deportado por la guardia estadoundense, mientras que los más desafortunados mueren en el intento.

Heriberto tuvo que caminar 4 noches, con poca comida y bebiendo agua almacenada en tambores de plástico. El último día ya no daba más del dolor estomacal y aún cuando pudo zafarse de la vigilancia, no logró vencer la infección que acarreaba. En la tarde fue declarado muerto en un hospital de San Diego.

"Tu ves a todos felices tomando cervezas, pero cada año se juegan la vida por venir. Esto es igual que una ruleta", comenta un primo lejano de Heriberto, quien pareciera tener completamente asumido el deceso, como si sólo se tratara de un juego de azar.

En estos momentos hay más de 12 millones de indocumentados viviendo en Estados Unidos. El grueso proviene de México. Para este año se esperaba una gran reforma sobre el tema migratorio, sin embargo lo más seguro es que la discusión se extienda por 12 meses más.

El caso de Heriberto se suma a las 100 víctimas que en promedio cobra anualmente la frontera en distintas circunstancias. El 14 de mayo de 2003, 19 personas perdieron la vida en Victoria, Texas, luego de asfixiarse en el camión que los transportaba y que fue abandonado por los "coyotes" en la carretera.

Deslumbrados por la bonanza económica y el manoseado "sueño americano", en estos precisos momentos muchos están embarcándose nuevamente hacia este país sin ninguna garantía. Nadie les devolverá el dinero si es que algo sale mal. Nadie les devolverá la vida si es que todo sale mal.

Y todo por un puñado de dólares.

jueves, junio 22, 2006

Hace un año...


Hoy compruebo que la trillada frase de "un año se pasa volando", es muy cierta. Hace doce meses que llegué a Nueva York (Long Island, para ser francos) y ni cuenta me he dado.

Ya lo decía Tommy Rey: "Un año más que se va, cuántos se han ido yaaaa..." Claro que la canción atiende a otro contexto, pero para el caso sirve.

Son tantas las cosas que pueden pasar en un año, que incluso ahora no puedo recordarlas. Para otra vez será.

Lo único que se me ocurre decir es que durante todo este tiempo me he tenido que acostumbrar a un clima distinto, a otra comida, a otro paisaje y, poco a poco, a una nueva manera de expresar. También he tenido que aprender a ver la vida de una forma diferente y entender necesidades distintas de la gente (como lo refleja la foto que encabeza este post. ¡UNA ESCALERITA PARA PERROS!).

Paciencia y tolerancia me digo todos los días.

Saludos para mí mismo.

jueves, junio 15, 2006

Cuando un amigo se va, queda un espacio vacío... (cuando los papás se van, también)


Me imagino que a estas alturas tanto Cristina como José deben estar rogando por bajarse del avión. Me imagino también que a mi papá ya no le importa el peso de las maletas (100 libras por cada uno, límite que mi mamá, pese a todas las cosas que se lleva, no sobrepasó).

Mis padres van de regreso a Santiago, después de vivir inténsamente más de 20 días con nosotros en esta isla al norte de Manhattan, además de pasar por Atlantic City y Washington DC. Siempre los vi contentos y entusiasmados, sus ojos brillaron en varias oportunidades y las bromas afloraron con genialidad otras tantas.

A mi hermano lo sentí pleno, feliz y ambos tuvimos la oportunidad de volver a ser hijos, de regalonear un poco y compartir la misma mesa.

Ya de madrugada la "titi" y el "tata" -como los nombraba mi sobrina Amanda- podrán reposar sus cuerpos en esa mullida cama, para en la mañana iniciar la parte más entretenida del retorno: abrir las maletas y contar las historias (a prepararse los amigos porque llevan toneladas de fotos y varias horas en video).

Sin duda éste fue, si no "el momento", uno de los hitos más relevantes de nuestra historia familiar. Un experiencia extraordinaria, con toques metafísicos, que bordeó la perfección (en lo personal quiero destacar su presencia en el encuentro freak con Jerry Only de Misfits).

Aunque ya no están aquí, y todavía no puedo soltar la lágrima que me sube y baja por la garganta, estoy seguro que seguimos unidos... incluso más que antes ¿Lo sienten? Yo todavía tengo sus aromas en mi ropa y la sensación de mi mano por el pelo de mi padre.

Los amamos. Nos amamos.

Auspiciadores

Queremos agradecer a todas las personas, empresas, productos e instituciones chilenas y extranjeras que de una u otra forma colaboraron en hacer de este encuentro algo magnífico.

Viña Santa Carolina
Viña Santa Rita
Viña Concha y Toro
Viña Morandé
Vino San José (Tetra Pak)
Pisco Mistral
Milo
Super 8
Negrita (de McKay)
Calaf (alfajores)
BigTime (Dos en Uno)
Artesanos de Santa Lucía (tres indios pícaros)
Laboratorio Chile
Ilko ( tostadores de pan)
El Matadero (ají merkén)
Leonisa (colaless)
LifeStyles (you know)
Aguardiente (marca desconocida, pero que le puso enjundia al cola de mono)
Las vecinas y vecinos de 5 Norte
Cruz Roja de Renca
Tíos, tías, primos, primas, sobrino y abuelita.
Los cabros de Salomón Saque con Sobrelalínea
Librería Mosqueto
Chilevisión (Tania A.)
Persa Bío Bío
The Clinic
Rolling Stone Chile
El Periodista